El herpes genital es una infección de transmisión sexual, causada por el virus del herpes simple. Se contagia por medio del contacto piel con piel durante las relaciones sexuales.
El herpes genital es una enfermedad de transmisión sexual causada por el virus del herpes simple(HSV) que se transmite de persona a persona principalmente por el contacto sexual.
Una vez infectado, el virus permanece latente en el cuerpo y puede volver a activarse en cualquier momento. Cuando los signos y síntomas de la enfermedad se manifiestan, se conoce como un brote de herpes.
¿Cómo se contagia el herpes genital?
Afecta a la piel o a las membranas mucosas de los genitales y se transmite de una persona a otra durante el contacto sexual.
Hay 2 tipos de virus del herpes simple:
VHS-1: Con frecuencia afecta la boca y los labios, y causa úlceras bucales o ampollas febriles. Sin embargo, se puede transmitir de la boca a los genitales durante el sexo oral.
VHS-2: Casi siempre causa el herpes genital. Se puede transmitir a través del contacto con la piel o a través de líquidos orales o genitales.
Puedes infectarte si tu piel, vagina, pene o boca entran en contacto con alguien que ya tiene herpes. Tienes más probabilidades de contraer herpes si tocas la piel de alguien que tenga ampollas, erupciones o úlceras asociadas al herpes, incluso cuando no hay ninguna úlcera ni otros síntomas presentes.
Te puedes contagiar del herpes genital:
Durante las relaciones sexuales vaginales, anales u orales con alguien que tiene la infección.
Tocando una llaga de herpes.
Con la saliva si tu pareja tiene una infección de herpes oral.
Con las secreciones genitales si tu pareja tiene una infección de herpes genital.
Cuando tu pareja sexual tiene el virus y no lo sabe.
Practicando sexo oral con una pareja sexual que tenga herpes oral, etc.
Síntomas del herpes genital
Los síntomas generalizados pueden abarcar fiebre, dolor de cabeza intenso, dolores musculares en la región lumbar, glúteos, muslos o rodillas. Ganglios linfáticos inflamados y sensibles en la ingle durante un brote.
Los síntomas genitales incluyen la aparición de ampollas pequeñas y dolorosas, llenas de un líquido claro o color paja. Generalmente se encuentran:
En mujeres: En los labios vaginales, vagina, cuello uterino, alrededor del ano y en los muslos o en las nalgas.
En hombres: En el pene, escroto, alrededor del ano, en los muslos o en las nalgas.
Ambos sexos: Lengua, boca, ojos, encías, labios, dedos de la mano y otras partes del cuerpo.
Antes de que las ampollas aparezcan, puede haber hormigueo, ardor, picor en la piel, dolor en el sitio donde las ampollas van a aparecer, etc. Cuando se rompen las ampollas, dejan úlceras muy dolorosas, las cuales forman costra y se curan de manera lenta.
Diagnóstico del herpes genital
Las lesiones son típicas y, durante los brotes, son fáciles de reconocer por un médico especialista. Algunas de las pruebas que se pueden realizar son:
Muestras de cultivo para identificar el virus.
Por medio de serología: Puede identificar tanto el virus tipo 1 como el virus de tipo 2.
Tratamiento del herpes genital
Aunque no hay cura para el herpes genital, la infección puede ser controlada con terapia antiviral. El tratamiento con antivirales sirve para acelerar la cura de las lesiones, aliviar los síntomas, impedir complicaciones y reducir el riesgo de transmisión para otros.
A las personas con historial de herpes genital recurrente se les aconseja que mantengan una reserva de medicamentos antivirales en casa de tal manera que puedan iniciar el tratamiento apenas surjan las primeras señales de una recurrencia.
Complicaciones del herpes genital
Otras ETS, ya que aumenta el riesgo de contraer o contagiar otra infección como el VIH o el SIDA.
Durante el parto, el bebé puede infectarse con el virus del herpes simple.
Puede causar hinchazón e inflamación dentro de los órganos que intervienen en las relaciones sexuales y la micción.
Infección en los dedos de las manos.
Infección ocular.
Hinchazón del cerebro.
Infección de los órganos internos, etc.
Brotes del herpes genital
Las llagas por lo general se ven como una o más ampollas en los genitales, el recto o la boca, o a su alrededor. Esto se conoce como tener un brote.
Las ampollas se rompen y dejan unas llagas dolorosas que tardan una semana o más en curarse.
Durante el primer brote, también pueden presentarse síntomas similares a los de la gripe.
Las personas que tienen un brote inicial pueden tener otros, especialmente si tienen el VHS-2, pero los brotes siguientes pueden durar menos y ser menos intensos.
Aunque el herpes genital es una infección de por vida, la cantidad de brotes que tenga una persona podría disminuir con el tiempo.
Información detallada
Parte del cuerpo afectada: Boca, piel o genitales.
Fármaco indicado: Antivirales.
Posibles complicaciones: Llagas en los genitales dolorosas, aborto espontáneo, parto prematuro, etc.
Posible tratamiento: Antivirales.
Terapia preventiva: No hay vacuna o medicación para evitar el contagio.
Factores de riesgo: Relaciones sexuales sin protección y tener sexo con un brote.
Evitar la reaparición: Por el momento no hay cura.
Síntomas: Ampollas o llagas, dolor muscular, fiebre, picor, dificultad al orinar, etc.
Agente infeccioso: Virus VHS-1 o VHS-2.
Tipo agente infeccioso: Virus.
Método de transmisión: Piel, boca y genitales.
Autor
Eva Sánchez
Asesora en educación sexual y salud integral de la mujer, Autor
Asesora en educación sexual y salud integral de la mujer, comunicadora social y periodista con más de 10 años de experiencia en periodismo y webs médicas especializadas. Una de mis especialidades es escribir contenido médico de alto valor para nuestros lectores.
Creación: 31 Enero 2019 Actualización: 20 Enero 2025