¿Es seguro el sexo anal? Reglas claves a seguir

Desde la edad media el sexo anal se ha considerado un tema tabú y a lo largo de los siglos casi todas las religiones lo han condenado. Las razones del rechazo son por un lado, el sexo anal era una de las medidas naturales más utilizadas para controlar la natalidad; por otro, la práctica de este sexo tenía altos riesgos higiénicos. A día de hoy el sexo anal es una de las prácticas sexuales más extendidas entre las parejas homosexuales.

Como normalmente el esfínter se encuentra cerrado, el sexo anal podría ser doloroso si previamente no se ha distendido este músculo.

Sexo anal seguro

El sexo anal no está exenta de riesgos. La mucosa rectal es sensible y un lugar propicio para que se desencadenen infecciones. Además, esta mucosa cumple una función absorbente, función que puede aumentar ante una penetración fuerte por el ano que puede provocar a su vez que se generen heridas pequeñas en la zona y hemorragias. Los riesgos más frecuentes son:

• Posible contagio de enfermedades de transmisión sexual, como VIH, Sífilis, Herpes genital o Gonorrea, entre otros.
• Detonador del Virus del papiloma humano y todos los tipos de hepatitis.
• Desgarros.
• Lesiones.
• Hemorragias si se practica con demasiada fuerza.
• Genera infecciones si no se utiliza protección y se practica con mala higiene.

¿Qué higiene hay que tener con el sexo anal?

• La primera precaución que debe tomar la pareja que quiera practicar sexo anal es utilizar el condón.
• Es imprescindible mantener el máximo nivel de higiene en el recto y en el ano antes de  la penetración.
• Tener una buena higiene en el pene y/o en los juguetes sexuales, si los hubiera.

¿Es importante la lubricación?

El ano y el recto no tienen de forma natural una lubricación que facilite las relaciones sexuales y los músculos de esta zona no son tan elásticos e impiden la dilatación. Esto puede provocar que en muchos casos se produzcan heridas y desgarros. Para evitar esto, es aconsejable usar algún tipo de lubricante que favorezca la penetración.

La masturbación anal

La masturbación anal es la estimulación de la zona del ano con el fin de intensificar el orgasmo. Las formas más comunes de masturbación son la inserción de uno o más dedos o de algún tipo de juguete sexual.

• En los hombres, la masturbación anal puede ser placentera porque puede llegar a tocar la próstata.
• En el caso de las mujeres, con la masturbación también pueden llegar a estimular la vagina.

Las técnicas más utilizadas incluyen tocar el orificio anal mientras se masturban los genitales o la estimulación del ano mientras se realiza el coito.
Introducir un objeto en el interior del ano también tiene unos peligros asociados. Esta zona es sensible y, además, las paredes intestinales no causa dolor cuando se introducen objetos.

Autor

Delia Sánchez

Comunicadora social y periodista con más de 15 años de experiencia en periodismo y webs médicas especializadas. Una de mis especialidades es escribir contenido médico de alto valor para nuestros lectores.

Creación: 5 Octubre 2020 Actualización: 22 Noviembre 2023