Grupos Anti-Elección acosan a las mujeres

La Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción del Embarazo (ACAI) ha publicado un comunicado en el que pide a los colectivos sociales, grupos políticos y asociaciones de mujeres su apoyo para las mujeres que quieren abortar. También solicitan el respaldo para las y los profesionales que posibilitan esta prestación sanitaria.

La autodenominada asociación  Corazón de María lleva tiempo concentrándose frente a la clínica Ginecenter de Málaga para impedir el acceso de las usuarias al centro. No son las únicas personas que acosan a las mujeres para dificultar su derecho a decidir, pero estos últimos días la presión se ha intensificado en diferentes clínicas de aborto.

ACAI afirma que la clínica de Málaga lleva sufriendo este acoso de forma intermitente desde 2014, frente a la pasividad del Subdelegado del Gobierno, que no ha recibido a las/los profesionales del centro, ni se ha respondido sus denuncias. Solicitan que las personas responsables de velar por la seguridad de las mujeres se impliquen de la misma manera que lo harían si se alterara el orden público frente a un centro sanitario público o cualquier edificio oficial.

También exigen a la Conserjería de Sanidad de Andalucía que forme parte en el asunto, puesto que si el personal médico de estos centros no puede ejercer su labor podría tratarse de un problema para la salud pública, no pudiendo garantizarse la prestación sanitaria. 

Consideran que se está ejerciendo violencia contra las mujeres y que muchas de ellas no se atreven a denunciar debido a que quieren conservar su anonimato por el estigma social que hay contra el aborto.

Así pues ACAI solicita que se atiendan las necesidades de protección de las clínicas IVE por ser una cuestión de orden público. Que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado acudan a las peticiones de auxilio (incluso cuando las concentraciones en sus inmediaciones no superen las 20 personas). Que la policía identifique a los integrantes de estos grupos fundamentalistas y permanezcan cerca como medida disuasoria, de manera que impidan intimidaciones y coacciones a las pacientes. Que las denuncias de las mujeres sean investigadas con eficacia y rapidez recabando las pruebas necesarias (ya que pueden existir delitos de daños, agresiones, etc.). De esta manera podrán ponerse a disposición judicial presuntos culpables. Todo esto fomentará la tolerancia 0 con dichos radicales.

La revista digital El Observador publicaba un artículo sobre este tema titulado “Los que rezan el rosario e insultan a la vez”. Afirmaba que el grupo ultracatólico que acude a la clínica Ginecenter de Málaga no se limita a la vigilia organizada a través de páginas católicas en internet (la campaña “40 días por la vida”). También atosigan a las mujeres mostrándoles fotos desagradables, acusándoles de cometer un crimen, citando inexistentes enfermedades “científicas” relacionadas con el aborto y provocando así el temor de las mujeres a acudir a practicarse una interrupción del embarazo. El momento más tenso, afirman, se produjo cuando una de ellas llamó a la policía para disolver la concentración, algo que no logró. En ocasiones anteriores, las denuncias por increpar de forma violenta a varias personas, tampoco han surtido efecto.

ADIM, Asociación para la Defensa de la Imagen Pública de la Mujer está acompañando y protegiendo a las mujeres que continua acudiendo a la clínica, firmes en su derecho a decidir. Según indica la misma revista, al menos se han presentado dos denuncias judiciales, una por parte del director del centro y otra por parte de una de las clientas que recibió dichos hostigamientos.

Autor

Delia Sánchez

Comunicadora social y periodista con más de 15 años de experiencia en periodismo y webs médicas especializadas. Una de mis especialidades es escribir contenido médico de alto valor para nuestros lectores.

Creación: 17 Marzo 2017 Actualización: 13 Mayo 2024